domingo, junio 23, 2013

Felipe Flores dice que construir cohetes rusos
es lo mismo que armar un barrilete.
Los hace volar por una pista para
pocos aviones: dos Piper y un Cessna 120
Una vez se cayó un avión sobre el monte que 
rodea el arroyo Pillahuinco
dicen que quedó sangre sobre los eucaliptos y 
que la sangre se secó y no salió más. 
Todavía busco esas marcas 
que recuerdo haber visto de pequeña.

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